Dile adiós a las ojeras

A partir de los 25 comienzan a aparecer, y permanecer, en la mujer cosas que antes no sabíamos que existían. Las odiadas ojeras parecen instalarse luego de una noche de fiesta. Y no es que haya que abandonar la diversión, nada más alejado, sólo aprender a saber qué hacer en estos casos.


Vale destacar que éste no es un problema que atañe sólo a las mujeres sino también a los hombres. Esas bolsitas bajo los ojos significan que los años pasan… y nos vamos pondiendo viejos, como cantaba Pablo Milanés. Las ojeras se presentan por muchos motivos, entre ellos dormir mal, alimentarse de forma incorrecta, el estrés, fumar, los cambios hormonales, las alergias y los problemas genéticos, etc.

En la mayoría de los casos son provocadas por venas bajo la piel alrededor de los ojos. Esta piel es en extremo delicada y mucho más delgada que la del resto del cuerpo. A medida que pasan los años esta piel se daña y se vuelve aún más fina y débil (lo cual provoca que las venitas y capilares se vuelvan más perceptibles). La situación se puede agravar si las venas se congestionan por alergias o enfermedades como el asma.


Otra condición que las genera es la pigmentación de la piel. Algunos personas las sufren incluso cuando no están desveladas o agotadas. En varios casos, los genes o los propios hábitos hacen que los individuos parezcan cansados, con la mirada opaca.

Por su permanencia, se las puede dividir en transitorias o provocadas. Estas últimas son consecuencia del cansancio, el mal dormir, el estrés físico o emocional, incluso de la mala alimentación. Para solucionar este problema existen varios tratamientos, tanto naturales como cosméticos, que logran excelentes resultados.

Algo fundamental para acabar con ellas es llevar una dieta saludable, dormir bien (los médicos recomiendan un promedio de 7 o 8 horas de sueño), evitar alimentos salados, utilizar protector solar, ingerir abundante agua, no fumar, ni ingerir alcohol o cafeína.

A su vez, éstas se pueden atenuar con tratamientos o disimular con maquillaje. Como cuidado cosmético, conviene usar, tanto por la mañana como por la noche, una crema hidratante específica para el contorno de los ojos. Esto ayudará a descongestionar y cuidar el área.

Asimismo, una buena solución es usar correctores. Para aplicarlos de forma correcta se comienza por limpiar bien la piel con una crema hidratante. Luego, colocar el corrector mediante suaves golpecitos, sin estirar la piel, y difuminarlo con una esponja en dirección de afuera hacia adentro. Este producto se lo puede usar solo, o por encima y por debajo de la base de maquillaje, pero cuidando siempre que se funda con la tez.

Según los especialistas en cosmetología, las mujeres de piel blanca deben usar un corrector en tono claro. Para las que tienen tez clara y cabello negro se les recomienda usar un color natural o beige. A las trigueñas y de cara rosada, le va bien utilizar la gama de rosas. Las de tez morena deben usar un tono beige dorado y las muy morenas, un bronce natural.

Otro de los tratamientos caseros es el uso de las bolsitas de té frío (en especial de manzanilla, ya que combate la inflamación) en los ojos. Por otro lado existe como solución la Cirugía Estética. Se llega a esta instancia en casos de ojeras graves. Aunque la cirugía no remueve por completo las bolsitas, sí logra eliminar el exceso de piel en esa área.

Existen varios tratamientos, además de los caseros, que logran dar una solución al problema de las ojeras. Entre ellos están: tratamiento despigmetizante (actúa sobre la melanina, responsable de la pigmentación de la piel), cremas blanqueadoras (contienen sustancias que reducen la formación de melanina y eliminan las células de la piel ya manchadas), peelings (se eliminan los pigmentos.